La alcachofa ( Cynara scolymus L. ) es una variedad domesticada del cardo silvestre ( Cynara cardunculus ), que es originaria de la zona mediterránea. Inicialmente era un planta de jardín muy extendida en la antigua Grecia. Siendo la cultura árabe la que extendió su aplicación en el medievo, adaptándola como planta medicinal y nutricional. Las alcachofas, son muy apreciadas en la cocina por su sabor y sus grandes beneficios sobre la salud. La puedes encontrar en todas las cocinas españolas. En nuestro país, hay una gran cultura culinaria, con este maravillosa manjar que nos provee la naturaleza. La alcachofa es una planta medicinal y comestible que tiene una gran cantidad de beneficios depurativos para el organismo, debido a su amplio rango de acción en la protección y cuidado del hígado ( 1 ), además de otras aplicaciones multisistémicas que tiene sobre nuestro organismo como por ejemplo: la reducción del índice glucémico en sangre ( 2 ) , la reducción de grasa corporal especialmente en la cintura ( 3 ) , la reducción de la presión arterial ( 4 ), aplicación contra el cáncer de próstata con resultados muy prometedores ( 5 ) , aplicación como antioxidante para la desinflamación de tejidos ( 6 ),  la reducción de colesterol malo y aumento del bueno (7), entre otros Sus principios activos más importantes son: la Cinarina y los flavonoides; apigenina y luteolina. A nivel nutricional, tiene una elevada cantidad de fibra; prebióticos como la inulina y folato en forma de ácido fólico, lo que favorece las funciones de regeneración del organismo.   La temporada de la alcachofa va de otoño a primavera, pues tiene dos floraciones: una de octubre a diciembre y otra de febrero o marzo a abril.